Se produce una solicitud de asilo por parte de una persona de nacionalidad peruana para poder residir y trabajar en territorio español.

Mientras se tramita dicha solicitud de asilo, sin que la cliente reciba noticias de su aprobación o denegación de la solicitud de asilo, esta entabla una relación sentimental con una persona de nacionalidad española.

Entonces la cliente acude al despacho de abogados planteándose si dicha relación sentimental le ofrece una mejor oportunidad para obtener un permiso de residencia que la que tenía con la solicitud de asilo.

Es importante resaltar qué el simple hecho de presentar la solicitud de permiso de residencia de familiar de ciudadano de la Unión, puede dar lugar al archivo del procedimiento de solicitud de asilo ya iniciado. Y esto es lo que ocurre en la mayoría de los casos.

En otros casos, vemos que se exige al solicitante de este permiso de residencia, renunciar previamente al asilo.

Es por esto que es de vital importancia que el interesado debe esté totalmente seguro de que cumple todos y cada uno de los requisitos para la tarjeta en cuestión, ya que, si ésta fuese denegada, no sólo perdería de cambiar de tarjeta, sino también la posibilidad de haber obtenido la condición de asilado respecto al procedimiento anterior.

Para obtener el permiso de residencia como familiar ciudadano de la Unión como cónyuge o pareja registrada de un ciudadano de la Unión Europea, es imprescindible acreditar el vínculo ya sea por certificado de matrimonio o certificado de inscripción de la Unión de hecho. También hay otras posibilidades, como que podamos demostrar que estamos en una relación estable si el interesado lleva como mínimo doce meses conviviendo con la pareja, o tienen un hijo en común.

Otras de las causas más comunes de denegación de esta solicitud es la acreditación de medios económicos. En este caso, es el ciudadano comunitario quien debe poder demostrar que cuenta con medios económicos suficientes para dar el derecho a su pareja a la tarjeta. Los medios económicos pueden ser acreditados si el ciudadano comunitario trabaja por cuenta ajena, por cuenta propia, o tiene suficiente dinero para demostrar que puede permanecer en territorio español con su pareja durante al menos un año. Esta cantidad está en torno a los 9500 euros. En el último caso, deberá aportar también un seguro médico.