Doña Marisa y Doña Vicenta fueron sorprendidas por los agentes de la Guardia Civil en el interior del domicilio de sus padres Don Eutimio y Doña Concha, cuando estos fueron a incautar una plantación de marihuana antes las sospechas de que allí se estuviera cometiendo un delito contra la salud pública.Los agentes encontraron un cultivo de marihuana así como un arma y dinero en efectivo que Don Eutimio reconoció como titular. Además de imputar una defraudación del fluio eléctrico a Don Eutimio.  

Doña Marisa y Doña Vicenta, Hijas de los titulares de la vivienda nada tenían que ver, ya que el hecho de estar en un domicilio donde se encuentren esas sustancias no acredita la participación en el delito contra la salud pública y por tanto resultaron absueltas.

El objetivo de la defensa, es conseguir la menor pena posible. Sobre todo centrándose en el hecho de que Doña Marisa y Doña Vicenta, no eran conocedoras de los ilícitos y el mero hecho de estar en el lugar del registro no prueba que fuesen autoras de los delitos. Por ello, ambas tienen que ser absueltas. 

La defensa se centra en demostrar la no vinculación de Doña Marisa y Doña vicenta con los hechos acontecidos. Por otro lado, conseguir la menor pena posible para Don Eutimio y Doña Concha. Para ello, busca la aplicación del artículo 80 del Código penal para conseguir la suspensión de la pena privativa de libertad. Esto lo logra gracias a que la calificación de los delitos como tal es baja, así como con la no tenencia de antecedentes penales por parte de los acusados.