El demandante concertó un crédito hipotecario con entidad bancaria. El préstamo ascendió a un importe de 140.800€ con un plazo de amortización de 444 cuotas mensuales con un periodo de interés fijo hasta una determinada fecha  y a partir de esa fecha con un interés variable Euribor más 1 punto porcentual.

El actor, no fue conocedor de que se establecía un interés tipo fijo hasta una fecha detrrminada y que a partir de esa fecha, pactaba un interés variable Euribor más 1%. Ese interés variable era sometido a un techo del 15% y un mínimo(suelo) del 4%. No fue informado antes de firmar ni en el momento de firmar. Además se contempla en el contrato que la revisión del Euribor será semestral por lo que se revisa el tipo de interés.

El demandante ha cumplido de forma estricta todos los pagos de las cuotas tanto de las sometidas al interés fijo inicial como de las de cláusula de interés variable y de cláusula suelo del 4%. Tras haber pagado durante unos años, relcama la cantidad abonada y cobrada en exceso.

Se condene a la entidad a restituir al actor las cantidades que en concepto de interés que se han abonado indebidamente y cobrado en exceso, ascendiente a 19.237,23 €.

La actuación del demandante fue en todo momento como consumidor al haber actuado en un ámbito ajeno a su profesión y por tanto consumidores a la luz del artículo 3 de la Ley General para la Defensa de Consumidores y Usuarios(Real Decreto Legislativo 1/2007). 

En consecuencia, la cláusula por la que impone a mi mandante un suelo de tipo de interés no ha sido objeto de negociación individual, al modo que establece el art. 82 de la Ley citada de consumidores y Usuarios habiendo sido predispuesta por la entidad demandada e impuesta a mi representado. Es más, la cláusula suelo impugnada mediante la presente demanda es una condición general de la contratación(art. 1 Ley 7/98 sobre Condiciones Generales de la Contratación) al cumplirse las condiciones de predisposición, imposición y destino a una pluralidad de contratos.

En el mismo sentido, la entidad demandada no informó adecuadamente a mi mandante de la dimensión y consecuencias de la citada cláusula tal y como le exigía el artículo 5 de la Orden de Transparencia bancaria de 5 de mayo de 1994, aun siendo un préstamo inferior a 150.000€ y hoy confirma las Orden de octubre de transparencia y protección al cliente de servicios bancarios.