El Juzgado de Primera Instancia de Picassent dicta Sentencia recaída en proceso de divorcio de mutuo acuerdo por la cual se acuerda la disolución del matrimonio constante hasta ese momento entre demandante y demandada, aprobándose el convenio regulador suscrito por las partes. La situación de crisis matrimonial se remonta no obstante a un par de meses atrás. El régimen económico matrimonial era el de absoluta separación de bienes al haber otorgado capitulaciones matrimoniales.

Cuando los litigantes firman la hipoteca de la vivienda familiar, la entidad bancaria con quien la suscriben procede a la apertura de cuentas. Centrándonos ya en la cuenta corriente abierta siendo cotitulares los entonces cónyuges. Las partes acuerdan que la finalidad de esa cuenta iba a ser el ahorro familiar, siendo gestionada directamente por el demandado desde el momento mismo de la apertura. A tal fin, realizó traspasos de dinero desde la cuenta corriente privativa de la demandante conforme iba viendo que se acumulaba saldo en dicha cuenta; el demandado le comentaba a su esposa que estaba haciendo lo mismo con el saldo acumulado de su propia cuenta privativa.

Las cuotas mensuales de la hipoteca se cargaban directamente a la cuenta privativa que la demandante tiene abierta. En dicha cuenta únicamente se realizaban ingresos de carácter privativo de la demandante, esto es, los dimanantes de su actividad laboral o percepciones del subsidio por desempleo. La única excepción son cuatro ingresos correspondientes a devoluciones de la renta del demandado, que fueron ingresados en esa cuenta porque era la que tenía a mano la persona que las realizaba (hermana de la actora).

Los traspasos no iban dirigidos a afrontar pagos de gastos familiares, ya que todos los movimientos de salida de dinero tenían como destino las cuentas privativas del querellado.

Que se declare:

a) La condena al pago de la cantidad pedida en la demanda más la cantidad que resulte en concepto de interés legal que devengue la expresada cantidad, desde el día de hoy hasta su efectivo pago.

b) las costas causadas y que se causen en este procedimiento.

El demandado, tal y como se acredita oportunamente, dispuso durante años de los fondos ingresados en la cuenta de constante referencia para incorporarlos a su propio patrimonio, en un claro ejercicio de administración desleal del patrimonio común de los condóminos con la finalidad de obtener un enriquecimiento injusto.

El demandado ordenaba traspasos periódicos a su cuenta privativa a pesar de que el fin que sustentó la apertura de la cuenta no fue otro que el ahorro de la unidad familiar (no se olvide que el producto cuenta es una cuenta de ahorro que no permite transferencias a terceras cuentas, domiciliaciones o pago de recibos).

Mientras estuvieron casados, todas las cuentas, incluyendo la privativa de la actora eran gestionadas por el demandado, mi mandante solo se preocupaba de que en su cuenta privativa hubiera saldo, pero no revisaba los extractos de las cuentas relacionadas en el expositivo tercero ni las domiciliaciones de los recibos familiares en su propia cuenta. Confiaba en su marido.