La demanda de juicio verbal de guarda y custodia se interpone debido a los impagos de los 300 euros mensuales que se comprometió a pagar padre de la niña, menor de edad, tras la separación de sus padres, pareja de hecho estable, para sufragar el alquiler de la vivienda donde residía su hija. Pidiendo después 300 euros para alimentos.

El objetivo del cliente es conseguir una pensión alimenticia de 300€ para la hija menor de ambos y, también una paga de 300€ al mes en concepto de alquiler de la vivienda en la que reside la madre con la hija. Todo esto teniendo en cuenta que ya tenían un proceso de guarda y custodia de mutuo acuerdo que el demandado el día de su ratificación no acudió, lo que motivo el archivo del proceso, a pesar de haber sido él quien estableció los términos del convenio regulador de la guarda y custodia de su hija.

La estrategia del abogado en este caso es demostrar que la sepración de la pareja de hecho, en cuanto a la hija menor de edad de ambos se refiere, es de mutuo acuerdo, si bien también es cierto que no se ha pagado lo que se prometió por parte del demandado, acreditando por este abogado las facturas del agua, con aviso de suspensión, al igual de la luz, con importe de la deuda atrasada, y gas y teléfono, además del contrato de arrendamiento de la vivienda donde reside la menor.