Doña Paola trabaja como empleada del hogar de Doña Asunción. 

El 30 de noviembre de 2015 doña Paola inició un proceso de incapacidad temporal por enfermedad común, una vez finalizado el plazo máximo de trecientos sesenta y cinco días, Doña Paola solicitó una prórroga de ciento ochenta días más.  

Las conclusiones del medico, fueron que Doña Paola no puede realizar por completo ningún esfuerzo físico. 

El objetivo del cliente es que se declare sentencia que anule y deje sin efecto el alta medica emitida el día 9 de mayo de 2017. 

El abogado de la parte actora pretende que se estime la pretensión de su cliente de que se anule y se deje sin efecto la resolución de la Seguridad Social por la que se establece su alta médica laboral y se extingue su condición de incapacidad temporal prorrogada, reponiendo la situación a su estado anterior e imponiendo que se proceda a terminar el plazo reglamentario para la incapacidad temporal y, subsidiariamente, que ordene que se proceda a la incoación de expediente por incapacidad permanente. Para ello, tras recibir la notificación de resolución de la Seguridad Social por la que se acuerda el alta médica, extinguiendo su estado de incapacidad temporal prorrogada, interpone Reclamación previa ante el mismo órgano administrativo alegando que sus condiciones de salud no han mejorado y que aún precisan de tratamiento para su curación, no pudiendo desempeñar su trabajo, por lo que se solicita que se reponga la situación a su estado anterior de incapaz temporal. Ante la resolución desestimatoria de dicho órgano adminsitrativo, procede a interponer demanda de impugnación de alta médica, valiéndose para ello de diversos informes médicos en la relación fáctica, expresando que de ellos se deduce que no sólo su estado de salud no ha mejorado respecto de la evaluación médica que motivó su prórroga, si no que ha empeorado, por lo que se encuentra incapacitada para realizar las labores propias de su profesión, empleada del hogar, por constar éstas de diversos esfuerzos físicos activos que se encuentran notoriamente desaconsejados por el médico informante. Así, solicita que se proceda a agotar, por ello, el plazo reglamentario de la incapacidad temporal prorrogada, como es la del caso, y que, subsidiariamente, se incoe expediente por incapacidad permanente. Propone pruebas documentales anticipadas solicitando se libre oficio, para disponer del expediente completo de la Seguridad Social y de la historia clínica completa de la actora.