El 19 de febrero de 2010 D.Dionisio sufre un accidente de coche cuando iba en compañía de su novia. Posteriormente D.Dionisio y su novia acuden a un despacho de abogados para recibir asesoramiento legal.

D.Federico, que es el Letrado designado para llevar el caso del accidente de circulación, realiza el asesoramiento legal y realiza las gestiones correspondientes. Llegado el momento del pago, D.Dionisio no realiza el abono de la cuantía correspondiente por la prestación de servicios del Abogado. 

D.Federico alega que fue el propio D.Dionisio quien lo designó como Abogado y que no asume el pago de sus honorarios por los servicios prestados.

D.Dionisio mantiene que simplemente acompañó a su novia a un Despacho de Abogados y que no fue el quien contrató los servicios de D.Federico como Abogado y que tampoco está de acuerdo con la cantidad que solicita la parte demandante por no haberla detallado suficientemente.

D.Federico presenta demanda ante el Juzgado de Primera Instancia solicitando que D.Dionisio cumpla con sus obligaciones de pago de honorarios.

Conseguir que se abonen las cuantías debidas por los servicios prestados al considerar que se aporta prueba suficiente para considerar probada la existencia de arrendamiento de servicios. 

Presentar demanda ante el Juzgado de Primera Instancia para conseguir que el cliente abone la cuantía correspondiente en concepto de los servicios prestados por haberle llevado un procedimiento previo ante el Juzgado de Instrucción como consecuencia de un accidente de circulación que había sufrido D.Dionisio como cliente a su Despacho.