Matadepera (Barcelona), 24-04-2006

De una parte Don Pedro, su conyugue y su hijo menor de edad, vecinos y residentes de Matadepera. Don Ramón, el jardinero de la casa. De otra parte Don Rafael, Don Fernando, Don Julio, Don Alberto, Doña Eugenia y Don Luis. De otra parte Don Andrés. En la madrugada del mes de Abril de 2006 Don Pedro, su conyugue y su hijo dormían en su residencia de Matadepera. Mientras tanto Don Rafael, Don Fernando, Don Alberto, Doña Eugenia y Don Luis entraban por la puerta del garaje, sorprendiendo al matrimonio mientras dormían, despertándolos y maniatándolos. Una vez maniatados les preguntaron donde se encontraba la caja fuerte, apuntándoles con una pistola en la cabeza. Don Pedro contesto a los asaltantes que no existía caja fuerte alguna, los asaltantes sustrajeron todas las tarjetas de crédito de los asaltados y les obligaron a decir el número secreto. Por la mañana llego Don Ramón, jardinero de la casa, a quien los asaltantes llamaron para que accediera a la casa y una vez dentro, lo ataron de pies y manos. Cuando los asaltantes terminaron de registrar la casa, dos de ellos se dirigieron a las sucursales bancarias donde Don Pedro y su familia tenían cuentas corrientes, retirando el máximo posible de los cajeros de la sucursal bancaria. Con la intención de que Don Pedro diera un numero falso de las tarjetas de crédito, varios asaltantes decidieron llevarse a la mujer de Don Pedro y a su hijo menor en el maletero del coche, hasta la obtención del dinero en varios cajeros de diversas oficinas, hasta que decidieron abandonar a la mujer e hijo de Don Pedro dentro del maletero del coche en una vía publica. Los asaltantes sustrajeron del domicilio de Don Pedro varios aparatos electrónicos, dentro ellos varios móviles, que posteriormente vendieron a Don Andrés, también imputados en la causa por delito de receptación. Además de los aparatos electrónicos los asaltantes sustrajeron joyas, dinero y un vehículo con el que recorrieron las sucursales de la zona.

Recuperar los objetos y el importe sustraído de las oficinas cercanas.

Denunciar los hechos, presentándose como acusación particular dándole impulso procesal al caso.Probando que los acusados entraron en la residencia de los cónyuges, que les privaron de su libertad.