Madrid., 01-01-2011

En el presente caso la parte recurrente es la parte actora, quien ha interpuesto un recurso de apelación, contra la sentencia de primera instancia que declara que la acción de nulidad por vicios del consentimiento del artículo 1301 del código civil,  está sujeta a un plazo de ejercicio de caducidad, y no de prescripción, por lo que habiéndose consumado el contrato de adquisición de participaciones preferentes con fecha 2 de marzo de 2006, al tiempo de presentada la demanda, el 07 de septiembre de 2010, la acción estaba ya definitivamente caducada. Sin que en el presente caso pueda interpretarse, como pretende la parte recurrente, que el plazo de es de prescripción y no de caducidad, en base a que la demandante es una consumidora, como tampoco el hecho de que la legislación bancaria y bursátil prevea mecanismos extrajudiciales, de resolución de conflictos a los que ha acudido la parte actora,

En nuestro caso, nuestro cliente es la parte actora, y el principal objetivo es conseguir una sentencia que revoque la sentencia de primera instancia que desestima la acción interpuesta por la actora, por considerar que la acción de nulidad por vicios  del consentimiento del artículo 1301 del código civil está sujeta a un plazo de ejercicio de caducidad, por lo que al tiempo de presentar la demanda la acción estaba ya caducada. En este sentido la parte recurrente pretende obtener sentencia que revoque dicha resolución de primera instancia, y que dicte una nueva por la que entre  conocer el forndo del asunto, como lo es la nulidad del contrato suscrito con la entidad bancaria por vicios del consentimiento.

Interponer recurso de apelación, con los fundamentos de derecho con los que se pretende demostrar la violación de derechos en que incurre la sentencia de primera instancia.