Dª Andrea adquirió mediante contrato de compraventa, elevado a escritura pública, el inmueble de D. Germán y Dª Consuelo, quienes habían delegado todos los trámites a una inmobiliaria.
Dª Andrea y su familia comenzaron a vivir en dicho inmueble adquirido el mismo día de la escritura ante notario, era verano, mes de julio de 2020, pero en diciembre de ese mismo año se apercibieron que las paredes y habitaciones debían tener filtraciones porque les habían aparecido zonas húmedas en las paredes de la casa. Dª Andrea quiso ponerse en contacto con los vendedores para llegar a un acuerdo respecto al precio que, todavía quedada por entregar, sin obtener resultado. Por lo que emprendió la acción de reclamación de cantidad por vicios ocultos en la cosa vendida.
Los demandados contestaron y apuntaron que, tanto al momento de las visitas previas, antes de la adquisición, como en el mismo día de entrega de la vivienda Dª Andrea inspeccionó la vivienda sin encontrar ninguna objeción y por lo tanto entienden que no se cumplen los requisitos exigidos para la acción “quanti minoris” que se ejercita.
El juzgado señaló audiencia previa donde comparecieron las partes y no se alcanzó acuerdo alguno quedando las pruebas para practicarse en el juicio.

Rechazar la acción quanti minoris en lo referente a la rebaja del precio de venta, dado que el inmueble se encontraba en condiciones perfectas cuando se entregó. Para ello debe demostrar que las condensaciones son fruto de la mala ventilación o nula ventilación de los nuevos ocupantes y que nada de ello se les puede achacar a los ocupantes anteriores. Demostrar que en la junta de propietarios se acordó reparar la fachada, pero nunca se llegó a ejecutar la obra.

Demostrar mediante fotografia, y testificales  que los vendedores no conocían de los vicios ocultos que la parte denunciante les reclama. Demostrar que la vivienda, en la que los propios vendedores vivían y, sobre la que se había realizado una importante reforma hacía poco tiempo, cumplía con todos los requisitos necesarios tal y como se vendió.Demostrar mediante las actas de lasjuntas de propietarios los acuerdos tomados y que las humedades aparecidas son fruto de la condensación, que ésta se debe a una falta o poca ventilación de la vivienda.

Demostrar que en la junta de propietarios en el tiempo que D. Germán y Dª Consuelo eran copropietarios no existió derrama para filtraciones por lo que no les corresponde abonar .la derrama que se ha presentado una vez que ellos ya no son titulares del inmueble.