Agresión, abuso y acoso sexual

Derecho penal. 3 Delitos de agresión sexual. Prueba de ADN. Autor y cooperador necesario. Pena máxima artículo 76 del CP. Enervación de la presunción de inocencia. Casación.


  • FECHA DE RESOLUCIÓN DEL CASO: 01-03-2016
  • Materia: Derecho Penal
  • Especialidad: / Derecho Penal / Delitos / Contra la libertad y la indemnidad sexual / Agresión, abuso y acoso sexual
  • Número: 11763
  • Tipo de caso: Caso Judicial
  • Voces: AGRESIÓN SEXUAL, AUTORÍA, Indemnizaciones por secuelas

SUMARIO

- DOCUMENTOS JURIDICOS DEL CASO

- EL CASO

- PROCEDIMIENTO JUDICIAL

  • Partes
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  • Argumentos
  • Normas y Artículos relacionados
  • Documental aportada
  • Prueba
  • Resolución judicial

- JURISPRUDENCIA

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  • Artículos jurídicos

- CASOS RELACIONADOS

Documentos originales presentados





El caso


Supuesto de hecho.
Madrid, 01-09-2011

El día 1 de septiembre de 2011, Doña L. se dirigió con su amigo J a un bar de Copas, lugar en el que a la 01h de la madrugada se encontró con Don M, quien se hallaba en compañía de otros dos individuos.

Tras entablar conversación con estos, uno de ellos invitó a L a una copa, tras lo cual comenzaron todos a bailar, y L, al no encontrarse bien, salió fuera del establecimiento a tomar el aire, siendo seguida por el Sr. M y los otros dos individuos, quienes le invitaron a acudir a otro bar y a conseguir cocaína, a lo que ella accedió, despidiéndose de su amigo J  y cogiendo un taxi con el M y los otros dos individuos.

Una vez llegaron y como quiera que la Sra. L no veía el bar de Copas, les dijo a los tres acompañantes que quería irse a casa, respondiéndoles estos " que se esperara un poco, que se lo iba a pasar bien, que estaba en buenas manos", y tras caminar por la zona durante un rato, el Sr. M. se ausentó del lugar y al poco rato apareció con el retrovisor de un vehículo en el que había puesto cuatro rayas de cocaína y, pese a su negativa a consumirla, uno de ellos le restregó a la Sra. L la boca con una de dichas rayas, tras lo cual el Sr. M y los otros dos individuos se introdujeron en el portal de un inmueble, donde la llevaron a la fuerza. Allí dentro, movidos por el ánimo de satisfacer sus deseos sexuales, la tiraron al suelo y, ante el temor de ser descubiertos, la introdujeron en un piso del inmueble y, tras acceder al mismo, la sujetaron por los brazos y las piernas y, tras subirle el vestido, le rompieron las medias y le quitaron el tanga, empezando los tres a tocarle el pecho, los glúteos y el resto del cuerpo hasta que, en un momento determinado, cogiéndole fuertemente por la boca, le obligaron a realizarles a cada uno de ellos una felación, acto que simultanearon el Sr. M y los otros dos individuos que le acompañaban para, a continuación, penetrarla, primero vaginalmente, cada uno de ellos, mientras los otros dos le sujetaban por las manos y los pies y, tras ello, tras darle la vuelta, analmente, también por cada uno de ellos, con la ayuda de los otros dos intervinientes, que le sujetaban por los brazos y las piernas.

Finalmente, el Sr. M y los otros dos individuos dejaron que la Sra. L se marchara del lugar, y ésta, aturdida por lo sucedido, paró un taxi Con el que se dirigió a la Comisaría a denunciar los hechos.

La Sra. L, a consecuencia de estos hechos, sufrió lesiones consistentes en: contusión con equimosis en la cara anterior de ambas rodillas y dolor en la región mandibular, presentando a la exploración ginecológica inicial intenso enrojecimiento vaginal y en introito, lesiones por las que tardó en curar 6 días, uno de ellos con impedimento para sus ocupaciones habituales, quedándole en la actualidad trastorno de ansiedad, trastorno distímico y trastorno de estrés postraumático. 

La Sra. Ortiz, en el momento de los hechos, presentaba un trastorno de inestabilidad emocional de la personalidad tipo límite con reacción mixta de ansiedad y depresión, estando en tratamiento médico que resultaba incompatible con la ingesta de alcohol y sustancias tóxicas que la misma tomó esa noche, lo que disminuyó su capacidad de reacción frente a la agresión sexual sufrida.



Objetivo. Cuestión planteada.

El objetivo del cliente es que se condene al acusado por un delito de agresión sexual y que se le indemnice por los daños sufridos.



La estrategia. Solución propuesta.


Cantidad de casos completos visualizados en el mes: