Los agentes del CNP 1009, 1001, y 1004 se encontraba fuera de servicio junto a Don Gonzalo (un amigo) en Alicante, uno de los menores expedientados introdujo la mano en el bolsillo del pantalón del agente nº1009 para, que, con ánimo de obtener un beneficio patrimonial ilícito, apoderarse del teléfono móvil que portaba, lo que finalmente no logró al percatarse el agente, quien previa identificación con su placa recuperó su teléfono.

En esos instantes, Don Jaime, Don Alberto, Don Juan, Don Pedro y Don Ricardo, increparon al agente nº1009 y al agente nº1004, quien se identificó previamente de la misma manera, fue agredido por todos los menores cuando acudió en auxilio de su compañero y de su amigo Don Gonzalo a quien estaban golpeando por todo el cuerpo. El agente nº1009, al ver lo que estaba sucediendo recibió un puñetazo en el pómulo izquierdo.

Finalmente, los agentes nº1009 y nº1004 consiguieron detener a uno de los individuos mayores de edad que participaron en la reyerta y, mientras se encontraban custodiándole, se aproximó a ellos el menor expedientado Don Alberto, quien propinó varios puñetazos a los agentes con el fin de que liberaran al detenido. El agente nº1004, durante la reyerta, sufrió un corte en la chaqueta y su camisa rota.

El objetivo de los clientes, en este caso, los agentes de policía con números 1001 y 1004 junto con su amigo Don Gonzalo es que se les declare a los acusados autores de un delito de atentado, además de un delito de lesiones y de un delito leve intentado de hurto, al haber sufrido por parte de estos, graves agresiones. Para ello aportarán los partes facultativos que les expidió el médico cuando acudieron al centro de salud para que fuesen reconocidos por este las fuertes heridas que presentaban.

El abogado basará fundamentalmente su defensa en la declaración hecha por la víctima, ya que en numerosas ocasiones la jurisprudencia ha reconocido que puede ser considerada prueba de cargo suficiente para enervar la presunción de inocencia.

Además, se apoyará también en el Código Penal. Argumentando en su defensa que los hechos son constitutivos de un delito contemplando en el art. 550.2 CP (atentado), tres delitos leves de lesiones (art. 147.2 CP con atención a lo dispuesto en la Disposición Transitoria 4º LO 1/15 exclusivamente a efectos de la responsabilidad civil exigible), un delito de lesiones (art. 1471. CP) y un delito leve intentado de hurto (art. 234.2 CP) en relación con los arts. 16 y 62 CP.

Finalmente, pedirá al Tribunal una indemnización de conformidad con lo establecido en el art. 116, en relación a los arts. 109 y ss. CP.